Por qué ciencia y por qué en papel

«Alguien me pide una explicación de la teoría de Einstein. Con mucho entusiasmo, le hablo de tensores y geodésicas tetradimensionales.
–No he entendido una sola palabra –me dice, estupefacto.
Reflexiono unos instantes y luego, con menos entusiasmo, le doy una explicación menos técnica, conservando algunas geodésicas, pero haciendo intervenir aviadores y disparos de revólver.
–Ya entiendo casi todo –me dice mi amigo, con bastante alegría–. Pero hay algo que todavía no entiendo: esas geodésicas, esas coordenadas…
Deprimido, me sumo en una larga concentración mental y termino por abandonar para siempre las geodésicas y las coordenadas; con verdadera ferocidad, me dedico exclusivamente a aviadores que fuman mientras viajan con la velocidad de la luz, jefes de estación que disparan un revólver con la mano derecha y verifican tiempos con un cronómetro que tienen en la mano izquierda, trenes y campanas.
–¡Ahora sí, ahora entiendo la relatividad! –exclama mi amigo con alegría.
–Sí –le respondo amargamente, pero ahora no es más la relatividad.»

Ernesto Sábato, Uno y el universo, Buenos Aires, 1945.

Este fue mi mayor temor: ¿seremos capaces de editar libros de ciencia sin perder un ápice de rigor? Aldous Huxley dijo:

«La divulgación científica es una nueva forma de arte…».

Quizá tuviera razón, ¿acaso el artista no observa la realidad hasta el cansancio y hace de ella una nueva versión? ¿No la cuenta a su manera? Si algo me obsesiona en la comunicación de la ciencia es el concepto de unidad. Los elementos que conformarán nuestra unidad, el libro mediante el cual vamos a transmitir las ideas de nuestros textos, el contenido, la gramática, ¡la ortografía! ¿Se limita el artista plástico a pintar? ¿Tiene en cuenta el formato? ¿La sala de exposiciones? No soy un experto en el arte pero puedo suponer que cuando una persona quiere transmitir algo –sea una sensación, emoción o conocimiento como es en nuestro caso– no puede perder de vista el contenido ni, por supuesto, el continente. Pero, ¿cómo ser fieles al rigor? Pocas y buenas ideas, pocos y buenos temas, y todo el conjunto en un formato delicioso. Eso pretende ofrecer Next Door.Nuestro logoUna serie de libros de divulgación que aborde cuestiones sencillas –o complejas– con sosiego; si un detalle es muy complicado, nos centraremos en él y dejaremos que el resto se desarrolle en otro capítulo, en otra serie, en otro libro. No tenemos prisa, internet es un lugar inundado de buena información, hay blogs de divulgación fabulosos en los que cada semana se abordan cuestiones de una misma temática. Eso les permite ahondar de forma inagotable.

Nosotros somos una editorial que elige el papel, y el papel es un soporte que nos conduce a la reflexión, a la atención, no hay hipertexto, no abandonamos la página, es calmo. Perfecto para ofrecer un contenido de calidad con moderación, cuya finalidad sea alimentarnos sin riesgo al empacho y garantizando la forma más rigurosa de comunicación.

Referencias:

  • Ernesto Sábato, Uno y el universo, Buenos Aires, 1945.
  • Aldous Huxley, Literature and Science, Harper & Row, 1963.