En ocasiones, los sueños se hacen realidad

Hace un tiempo compartí con vosotros lo que significaba para mí la divulgación y cuánto sentía no poder dedicarme a ella por completo. Poco podía imaginar entonces que os escribiría semanas después para explicaros que, en ocasiones, los sueños se hacen realidad.

La historia empezó una tarde lluviosa de noviembre, una de esas tardes que no imaginas que recordarás para siempre. Estaba muy animada charlando con  Oihana en la cafetería de la librería La Central. Me sentía a gusto, relajada, en casa. Hasta que Oihana me ofreció ser coordinadora editorial de Next Door y se me aceleró el pulso. Mientras me explicaba en qué consistiría el trabajo, quería parecer profesional e intentaba disimular la sonrisa de oreja a oreja que clamaba por aparecer. Las mejillas me ardían y me brillaban los ojos. Tenía ganas de gritar de felicidad. Lo que sentí por Next Door, en cuanto supe de su existencia, fue amor a primera vista. Me enamoré del proyecto y quise colaborar en él. Pero en ese momento, Oihana iba más allá, me brindaba una oportunidad que ni siquiera había soñado: formar parte de su equipo y dedicarle a Next Door todo mi tiempo. Temblaba.

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Quedamos en que me pasaría la oferta económica al día siguiente para que la valorase. Pero os confieso que yo, para mis adentros, ya había aceptado. Deseaba con todas mis fuerzas trabajar en Next Door, unirme a una iniciativa dispuesta a buscar nuevas formas de divulgar la ciencia.

Durante este mes de diciembre estoy simultaneando mi anterior empleo con algunas tareas de la editorial. Cada vez estoy más ilusionada. He empezado a coordinar el blog y me emociona leer los posts de Oihana y de nuestros excelentes colaboradores (se me cae la baba con ellos). Estoy convencida de que he encontrado mi lugar. Quiero emplear mi vida en lograr que los textos de divulgadores de su talla lleguen a la gente. Quiero participar en la edición de libros de divulgación que cuiden tanto el contenido científico como el estilo narrativo y la estética: obras de arte para todos los públicos.

Mi función como coordinadora editorial, a grandes rasgos, consistirá en planificar, compaginar y controlar todos los procesos y profesionales que intervienen en la producción de un libro (incluyendo en producción no sólo la fabricación sino también su distribución y comercialización). También me encargaré de la comunicación, es decir, de contactar con los medios y llevar los perfiles en Twitter, Facebook y Google+. Esto último me permitirá estar en contacto con vosotros, cosa que me satisface enormemente.

A algunas personas que aprecio les ha sorprendido que deje un buen trabajo o un trabajo “seguro” para unirme a las filas de una editorial que está en sus inicios, “con lo mal que está el mundo editorial”. Por si no han quedado claras mis razones, os daré una más: yo sólo tengo una vida para perseguir mis sueños y no pienso desaprovecharla. Next Door es un proyecto que me apasiona y creo en él.

Quería compartir estos sentimientos con vosotros que leéis el blog, que visitáis nuestra web, ya que, por lectores como vosotros, estamos dispuestos a hacer que esto salga adelante.

El futuro es Next Door.

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